UNA CANASTA DE AMOR
Recuerdo de pequeño cuando mi profesor de educación física en la escuela primaria, allá por el año 1971, me invito a participar del equipo del colegio con niños que me llevaban ventaja en la practica del básquetbol, dizque mi maestro vio en mi a un niño muy vivaz y lo que aquí en el Perú le llamamos “mosca”, me saco del fútbol para jugar básquet deporte al cual me entregue con todas mis fuerzas llegando a ser mi preferido. No tenia idea de cómo se jugaba el básquetbol pero mi profesor solo me dijo que diera bote y cuando deje de hacerlo lance, obediente le hice caso y paso algo inesperado, mi primer lanzamiento a lo que salga desde una esquina del campo de juego ingreso a la canasta y así empezó mi idilio con el básquetbol, no había recreo que no juegue baloncesto, me divertía mucho practicándolo, como que mi vida cambio y todos los problemas que tenia en casa eran poca cosa a comparación del básquetbol. Competir era inevitable con otros colegios,los triunfos y las derrotas